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| Anubithar |
Comenzamos aseverando que la salud mental es el equilibrio entre lo psicológico, físico, emocional y social en la vida de un individuo. Tal bienestar puede verse afectado por situaciones y decisiones propias de la cotidianidad (accidentes, problemas familiares y laborales, enfermedades, mala economía, divorcio, desempleo y otras tantas), y también pueden incidir factores de tipo biológico.
Teniendo claro lo anterior, la salud mental es esencial para responder a todas las circunstancias de la vida con raciocinio —, con conductas adaptativas positivas, con habilidades para las relaciones interpersonales, y, por supuesto, para enfrentar efectivamente el estrés (Wikipedia, 2023). De hecho, cuando este último aparece, la salud mental comienza a verse afectada porque exige un sobreesfuerzo y un sobre funcionamiento del organismo.
En adelante, más al respecto.
¿Hay relación entre el estrés y la salud mental?
Sí, definitivamente existe una relación entre ambos, ya que la permanencia prolongada del estrés en nuestras vidas produce el deterioro de nuestra salud mental. ¿Cómo sucede?, bueno, el cerebro a través de la pituitaria les indica a las glándulas suprarrenales cuánto cortisol produce en una situación de estrés o emergencia —digamos que es una respuesta para enfrentar los problemas—.
Entonces, dicha hormona se activa generando un aumento de glucosa en la sangre, que a su vez envía mucha energía a los músculos para ponerlos en movimiento y así ayudarnos a salir de la circunstancia adversa. Pasado el episodio de alerta, la secreción de cortisol disminuye y el organismo se relaja nuevamente.
Ahora, ante el estrés continuado tal cese no ocurre, y es ahí donde la salud mental comienza a mermar (consultaiglesias.com, 2023).
Consecuencias del estrés
Con un aumento constante de cortisol en el organismo por causa del estrés, la estructura del cerebro puede comenzar a cambiar produciendo transformaciones en las zonas encargadas de controlar las emociones y la conducta (Banner Health, 2023). En este sentido, comienzan a aparecer síntomas que amenazan la salud mental, tales como los cognitivos, los psicofisiológicos, los emocionales y conductuales.
Esta es una lista de tan solo algunos de los problemas que puede generar el estrés en nuestras vidas:
- Ansiedad;
- Disminución de las actividades físicas;
- Irritabilidad;
- Cambios constantes de humor;
- Depresión;
- Falta de concentración;
- Ausencia de motivación;
- Pensamientos constantes y casi siempre negativos;
- Náuseas;
- Falta de energía;
- Tensión en los músculos;
- Fatiga;
- Sistema inmunológico débil;
- Baja autoestima;
- Pesimismo;
- Disminución del apetito sexual.
Además, de acuerdo con información de la OMS (2023) el estrés conlleva a comer desmedidamente o muy poco, también al consumo de alcohol, cigarrillos y drogas como una salida a la ansiedad.
Acciones para enfrentar el estrés y evitar el deterioro de la salud mental
Sabiendo que la salud mental es importante para nuestro desempeño como individuos frente a cualquier área de la vida, es necesario tomar acciones adecuadas para que el estrés y otros aspectos no la afecten negativamente. Por ejemplo, podemos comenzar con aprender herramientas para manejarlo como la respiración profunda y consciente. La meditación, los estiramientos, el ejercicio, la buena alimentación, dormir bien, la terapia psicológica, salir a pasear y divertirse sanamente —ya sea en actividades al aire libre o bajo techo— son alternativas positivas para aligerar las cargas del día a día.
Por otro lado, es imperativo expresar todo lo que nos afecta y tambalea nuestras emociones. Aquí cuentan los amigos, la familia, los terapeutas e incluso la pareja sentimental; aislarse ante los problemas o alguno de los síntomas del estrés es entrar en un laberinto sin fin. Es mejor enfrentar la situación con el apoyo de los demás, que encerrarse en la negatividad.
